La naturaleza nunca deja de sorprendernos, y en esta ocasión vamos a hablar acerca de un animal muy particular, que no es otro que un escarabajo que tiene la capacidad de conseguir sobrevivir al sistema digestivo de las ranas, ya que sale por el ano tras ser engullido y lo hace en perfectas condiciones de salud.
El escarabajo acuático asiático que sale por el ano tras ser engullido
Cuando hay una rana cerca, una de las cosas en las que no nos gustaría reencarnarnos es en la figura de un escarabajo, y es que se trata de un animal muy sabroso e interesante para estos anuros.
No obstante, si alguna vez tenemos que elegir reencarnarnos en algún tipo de escarabajo, quizás lo más interesante sea decantarnos por este escarabajo acuático asiático conocido científicamente como Regimbartia attenuata, y es que tiene una capacidad asombrosa para conseguir escapar de la rana incluso una vez ha sido ingerido.
Se trata de un escarabajo que se encuentra en multitud de zonas de Asia que incluyen China, Corea, Japón y Rusia, las mismas en las que se puede encontrar la rana Pelophylax nigromaculatus, una voraz devoradora del bichitos despistados.
A través de una investigación llevada a cabo en Japón por un equipo de investigadores de la Universidad de Kobe, se ha podido observar que, en el caso de este escarabajo, su forma de defensa no se basa en emitir sustancias tóxicas, fuerza, rapidez o capacidad para esconderse de sus depredadores, sino que puede pasear tranquilamente hasta que a la rana se le ocurra ingerirlo.
Hay que tener en cuenta que no se trata del único animal que tiene la capacidad de resistir a este proceso digestivo y salir por el ano con vida, pero la particularidad en este caso es que no lo hace entre las heces del animal como ocurre con el resto, sino que directamente, por su propia cuenta y riesgo, va andando por todo el recorrido y sale por sus propios medios.
Cómo consigue escapar sano y salvo
Hay que partir de la base de que las ranas, y concretamente esta variedad, engullen a sus presas, es decir, no tienen dientes y por lo tanto no las trituran.
De esta manera, dependen de sus fluidos digestivos para conseguir realizar la digestión y matar a estas presas.
En el caso de este escarabajo, tal y como podemos observar en el vídeo siguiente, escapa íntegro, aunque cabe destacar que no todos ellos salen, sino que según el estudio realizado, se consigue salvar el 93,3%, logrando salir de la rana desde en apenas unos segundos hasta en tres horas y media.
Dependiendo del ejemplar de rana, la distancia desde la boca hasta la cloaca oscila desde los 22,5 mm y hasta un máximo de 74,2 mm, un recorrido al final del cual, se ve en la necesidad de abrir la cloaca para poder salir, algo que se producirá de forma involuntaria por la rana sin que ésta pueda evitarlo, gracias a lo cual, el escarabajo sale por el ano tras ser engullido y en perfectas condiciones para seguir tranquilamente con su vida.
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